Emanuel se bautizó este verano. Lo bautizamos y fue un tiempo maravilloso.

Él es un joven con un corazón lleno de fe y pronto será el esposo de nuestra hija Elizabeth Arria.

Nos gozamos en gran manera en lo que Dios está haciendo en la vida de Emanuel.

Mientras yo me dirijia a Emanuel antes de bautizarlo por “error”lo llame Samuel. Cuando “confundo” nombres de esta manera ya no lo tomo como mero error del subconsciente pérdida de memoria. Creo fielmente que el Espíritu santo permite estas cosas para hablar algo.

Así que, le pregunte a Dios Señor ¿Por qué dije Samuel. en vez de Emanuel?

Inmediatamente escuché en mi interior: Samuel fue un gran profeta, declara una palabra profetica sobre Emanuel referente a su asignación en la tierra.

Samuel fue uno de los profetas más reconocidos en la biblia debido a cómo gobernó por un tiempo a Israel mediante la guía de Dios.

Es interesante que como profeta Samuel fue un instrumento de Dios para gobernar con la autoridad de Dios.

Además Samuel ungió a los dos primeros reyes de Israel apuntados por el mismo Dios. Saúl y David.

Samuel fue un vidente poderoso y temeroso de Dios. Su capacidad de oír la voz de Dios fue gigantesca y admirable. Dios nunca dejó caer sus palabras a tierra Dios siempre respaldó a Samuel.

Como profeta él no sólo podía conocer lo que nadie más conocía sino que también sabía lo que Dios quería hacer con su pueblo.

Creo que Emanuel es un profeta en mercado laboral. Aquella tarde después de bautizarse le pregunté sobre su empleo si él tenía una capacidad creativa e innovadora. El me dijo: si uno de los juegos en que trabajamos lo ideé yo.

Emanuel trabaja creando juegos digitales para consolas y otras. La verdad yo, se muy poco de estas cosas pero me quedó claro que el innova y crea nuevos juegos.

El don profético se caracteriza porque permite ver cosas en el ámbito invisible. Las ideas vienen de este ámbito espiritual-inmaterial y nosotros los seres humanos tenemos acceso a ese ámbito mediante el pensamiento.

Por esta razón Dios nos anima mediante el apóstol Pablo en la carta a los romanos diciendo renovaos en el espíritu de vuestra mente.

Dios coloca sus ideas en nuestra mente. Podemos ver mediante el pensamiento o la imaginación. Dios santifica nuestra mente y nos deja conocer lo que piensa cuando su Espíritu habita en nosotros. El profeta Isaías nos recuerda que nuestros pensamientos no son los pensamientos de Dios. Pero en nuevo testamento el Espíritu de Dios vine a vivir en el creyente y el apóstol Pablo llamó a Espíritu santo en el hombre: la mente de Cristo.

Emanuel tiene un don profético en el ámbito de su profesión y el mercado laboral. Dios le usara para bajar del cielo ideas innovadoras y hacer de la tierra un lugar mejor donde la gloria de Dios sea conocida a través de lo que hace.